En el contexto de la profunda crisis civilizatoria que vive la humanidad, se da igualmente una severa crisis de las izquierdas en diferentes partes del mundo. Las propuestas alternativas que fueron representadas por los denominados gobiernos progresistas en América Latina, en lo fundamental, fracasaron en términos de los objetivos que se transformadores que se propusieron. La incapacidad de la izquierda »oficial« para reflexionar crítica y autocríticamente sobre estas experiencias impide aprender de éstas, con lo cual no puede sino profundizarse la crisis de dicha izquierda como alternativa al capitalismo y, más ampliamente, a civilización en crisis.